miércoles, 29 de diciembre de 2010

Preguntas sobre hechos curiosos.


Quien lee los diarios habrá podido notar en el último tiempo una avalancha de artículos en las primeras planas sobre el "mal nombrado" Partido Obrero. Quien lee los diarios sin reflexionar sobre su contenido pensará que este hecho obedece a aquello que algunos llaman casualidad o simplemente podrá pensar -inocentemente- que quienes se encargan de bajar la línea editorial del diario sufrieron un golpe (talvez haya sido como consecuencia del golpe de calor) de piedad sobre los dirigentes del ahora prestigioso Partido Obrero, perseguido en declaraciones y politicamente por el Gobierno.
Quien lee los diarios con un espíritu más crítico (por no decir paranoico) y encuentra que de las 10 primeras noticias de clarin.com.ar y lanacion.com.ar las 10 son en contra de este Gobierno y las primeras que vemos victimizan al P.O se puede encontrar inquieto. Se pregunta, como hice yo: "a nadie le llama la atención que los diarios que representan los no tan difusos intereses de varios monopolios contrapuestos por definición a lo que cualquiera entiende son las ideas del P.O defiendan al P.O?" Es, cuanto menos, un hecho extraño. La pregunta es, nos les llama la atención a los dirigente del P.O y a sus militantes aparecer repentinamente en TN, Canal 13, Clarín y La Nación PERO NO COMO SE LOS PRESENTABA ANTES mediaticamente (como una sarta de violentos piqueteros irrespetuosos de la libre circulación que ensima tienen pedidos políticos anacrónicos como la revolución)? Como puede ser que ahora sus marchas y sus reclamos esten avalados por los grupos mediáticos concentrados, que de repente constituyan una agrupación política democrática y civilizada. Que de un día para el otro pasen de ocupar el papel de lacra social-política a victimas de la persecución y violencia patotera del Gobierno y sus aliados?. Todo esto es, cuanto menos sospechoso.
Cuál es la apuesta de un partido político sin representación popular alguna, intrasigente (su primer premisa política es la no-negociación) que no sabe medir fuerzas al mandar a manifestaciones de conocido peligro a militantes de 20 años?
Cual es la apuesta de un partido que hace uso político de las tomas diciendole a los que toman que se tienen que quedar allí cueste lo que cueste (sabiendo que ello podía significar más muertes) e incitandolos a no firmar nada con el "estado burgués"?
Qué realidad viven aquellos dirigentes de este partido que estaban en contra de darle el título de honoris-causa a Álvaro García Linera porque ello implicaba reconocer al "Gobierno" burgués del compañero Evo Morales.
Si bien la visibilidad y representatividad de esta organización se encuentra sobre-valorada habría que hacerse lo que es -a mi criterio- la pregunta de fondo: Partiendo de la premisa de que la política es la continuación de la guerra por otros medios y partiendo del hecho de que se viven momentos de fuertes luchas (mediáticas, de distribución, culturales, etc) con adversarios que tienen el "poder real" (el económico) de que lado estan parados aquellos que defienden o pertenecen al P.O? Dejándose usar por aquellos que quieren terminar con este Gobierno solo los hará complices de, en una eventual derrotado electoral del gobierno, retrocesos imperdonables para el campo nacional-popular.

lunes, 20 de diciembre de 2010

Reflexiones sobre lo ocurrido.

Pocos recuerdan la mal-nombrada Ley de Residencia que el Congreso Nacional sancionó en el año 1902. Una ley que iba claramente en contra de nuestra Carta Magna.
Su artículo 2º decía lo siguente: "El Poder Ejecutivo podrá ordenar la salida de todo extranjero cuya conducta comprometa la seguridad nacional o perturbe el orden público". El contexto, sabrán recordar, era la conocida "Inmigración masiva". Producto de la cual muchos de nuestros abuelos o bis-abuelos llegaron a este país.

Entre los años 1880 y 1920 llegaron al país más de 4 millones de inmigrantes de todas partes del mundo. Del Líbano, de Rusia, de Italia, de Francia, de Polonia, etc. La gran mayoría de ellos eran pobres. Sus países no tenían ni trabajo, ni educación para ofrecerles. La gran mayoría de ellos al llegar aqui vivían en inquilinatos, asinados sin agua, luz ni gas. Buscaban, como todo el mundo lo hace, un mejor pasar.
Lo mismo -pero con mucho menos flujo migratorio- ocurre hoy en día. En el marco del Plan Patria Grande vienen a nuestro país cientos de miles de hermanos latinoamericanos. La razón es la misma: buscan trabajo, educación y salud que sus países no pueden ofrecerles.

En 1902, la respuesta del gobierno no-democrático argentino fue dictar una ley para imposibilitar la entrada de aquellos que traían ideas raras (anarquistas y socialistas) y además poder expulsar a todos aquellos que no eran de agrado del Gobierno de turno. La misma era tan cruel que el ciudadano que era expulsado era expulsado sólo, sin su familia.
Ya en nuestra Constitución se aclara que los derechos que la misma otorga son "Para todos los hombres que quieran habitar el suelo argentino". No importa de donde sean, todos tenemos los mismos derechos.

Los últimos días ocurrieron algunos hechos que me dejaron pensando. El Jefe de la ciudad relaciona la situación problemática del Sur de la ciudad con los extranjeros. Afirma que allí hace falta represión y presencia policial. Dice -sin decirlo explicitamente- que son los extranjeros los que no respetan el espacio público y que si fuese por el ya los hubiese desalojado. Pero a la vez no quiere enviar a la Metropolitana, quiso que que Cristina mande a la Federal. Dice con total impunidad "inmigración descontrolada".
He aqui las banderas de la derecha: Basta de inmigrantes de países limítrofes (que encima no respetan los espacio públicos); Cuando hacen lío o cortan las calles hay que reprimir con armas(por no decir que hay que mandarlos de vuelta). Poco o nada se habla de política, de construir más viviendas, etc.

Además de ser este un intento de desestabilización del macrismo-ritondo-duhaldismo. A pesar de que el PO y los troskos aprovechan estas situaciones para generar mártires y correr al gobierno con el tema de la represión. A pesar de la barra brava de Huracán (ligada al macrismo) y a pesar del tremendo deficit habitacional del Sur de la ciudad, el Gobierno Nacional solucionó el conflicto (2 días más tarde, es verdad) de una manera impecable, en poco tiempo haciendo un verdadero uso de la política. La política una vez más demuestra ser la herramienta de solución ante cualquier problemática, aún cuando la situación es grave y aún cuando no fue el Gobierno Nacional el que ocasionó dicho conflicto.

Estamos en democracia, estamos creciendo. Argentina esta en condiciones de incorporar a toda la gente que quiera habitar nuestro suelo. Asi lo hicimos hace 80 años. Asi lo haremos ahora -SIN EXCLUSIONES-. Esa gente tenía ganas y voluntad de progresar. Laburaron como perros. Lo mismo hacen nuestros hermanos latinoamericanos.

Esto es lo que nos enseñó Néstor. Esto es lo que nos enseña Cristina. El problema no son los extranjeros y la solución no son los palos. El problema es el deficit habitacional (de salud y educación) de la Ciudad y la solución es la política.

Fragmento del discruso de asunción del Tío Cámpora

"Somos conscientes de las dificultades del proceso. Cada medida transformadora que adoptemos habrá de levantar la resistencia de los intereses que, desde afuera y desde adentro, se oponen a la política de cambio.

Prometemos al país en el cual la voluntad de todos los argentinos, vengan de donde vinieren, piensen lo que pensaren, tengan el pasado que tuvieren, se templen en la batalla por un futuro de independencia económica y de justicia social. Esta multitudinaria confluencia de voluntades conforma un caudal revolucionario y es promesa y certidumbre de liberación nacional.

Solo quedarán marginados aquellos que ponen su interés personal por encima del interés de la nación; aquellos que sirven de puente para la penetración colonialista; aquellos que son servidores genuflexo de los monopolios apatrias; aquellos que lucran con la entrega del país y aquellos que son instrumentos de la perpetuación del privilegio.”

martes, 7 de diciembre de 2010

Colectivos de Papel

Asi como si nada, son arrastrados a muchas decenas de kilómetros de la realidad. Vuelan y repiten frases, que ni siquiera constituyen argumentos. Le escapan a lo bueno e insisten con aquellas críticas que -casi siempre- se basan en experiencias o frustaciones personales. Esconden su lado anti-popular esgrimiendo largas listas de hechos de corrupción. Hablan de la pobreza como si la conocieran (o como si les importara). Viven su vida, y quieren seguir haciéndolo, con la lógica individualista que -literalmente- compraron en los 90´.

Asi como si nada, son arrastrados a rincones de pensamientos sin salidas. Se niegan a acceptar cualquier cambio cultural y mucho menos alguno que implique una verdadera redistribución del ingreso o del saber. Leen los periódicos como si de ellos se esgrimiera la verdad absoluta. Desconocen que detrás de ellos siempre hay intereses anti-populares.

Asi como si nada, critican a ciertos "personajes" que les dicen que hay que criticar. Se encolumnan detrás de ciertos periodistas complices de las peores calañas que se pueden imaginar. Defienden sus banderas conservadoras y anti-populares con odio manifestando que son los del otro bando los que atacan con violencia y vehemencia. Se escandalizan y atemorizan -en silencio- con el surgimiento de nuevos y profundos movimientos sociales.


Asi como si nada, viven engañados creyendo que la verdadera democracia reside lejos de aqui y pregonan el institucionalismo socialdemócrata europeo o el norteamericano. Los matices y los distintos contextos e historias de los pueblos son víctimas del olvido y la tergiversación.


Tenía razón el negro. Aquellos colectivos de papel son mucho más peligrosos, más dañinos y más movilizantes que aquellos otros que a veces vemos en la 9 de julio. Justamente porque sus pasajeros no se dan cuenta que viajan en ellos y desconocen que quienes conducen esos colectivos defienden sus intereses económicos-personales, contrapuestos a los intereses de las grandes mayorías populares.